sábado, 3 de febrero de 2018

Historia del Lamborghini que no fue - Lamborghini Cheetah BBurago 1/24

   LAMBORGHINI CHEETAH “ FOREST FIRE APPLIANCE”
                 LAMBORGHINI CHETTAH “ SAHARA PETROLEUM ASSIS.”
                                                BBURAGO 1/24 - ITALIA 


 



Cuatro pinceladas del coche real

Ahora que Lamborghini ha presentado su próxima novedad, un SUV de altos vuelos , el Uro o Uros, vale la pena recordar que no ha sido el primer “todo terreno” preparado por la factoría de Sant´Agata.
Nos tenemos que remontar a 1970, cuando se hizo por parte del ejército norteamericano un prototipo de un vehículo para sustituir a los Jeep Mutt, que a su vez provenían de los Jeep salidos de la Segunda GM. Este prototipo desarrollado por FMC, era el XR311 en principio no fue aceptado por el ejército. Posteriormente, Mobility Technology International (MTI), fue contratada por el el ejército norteamericano , y a su vez subcontrato a Lamborghini para realizar el prototipo , dando lugar a una denuncia por parte de FMC, contra MTI y Lamborghini en 1977, cuando el coche fue presentado en el Salón de Ginebra.

Construido en San José (California), el modelo fue enviado a la factoría de Lamborghini en Italia, para darle los últimos toques y rematarlo. Fue dotado de un motor V8 Chrysler de 5,9 l para una potencia final de 183 CV, y una transmisión automática de tres velocidades. Con carrocería de fibra de vidrio, disponía de espacio para cuatro ocupantes incluido conductor. Debido a la falta de potencia de su motor para el peso del conjunto (  2042 kg) y la posición de su motor ( posterior longitudinal), le daban una mala conducción y unas pobres prestaciones al todo terreno. Una velocidad máxima por asfalto de 167 km/h y 140 en arena.





Al final el proyecto le fue concedido a AMG, y su conocidísimo HMMWV. Supuestamente  durante las pruebas el ejército norteamericano destrozó el Cheetah, pero sus restos nunca fueron devueltos ni a MTI, ni a Lamborghini. Tras el fracaso del proyecto Cheetah, Lamborghini preparó otro prototipo basado en este, el LM001, con motor posterior pero de AMC pero con el mismo problema básico de su antecesor, el motor en la parte posterior. Tras preparar otros prototipos de todoterrenos, se acabó presentando el LM 002, con un diseño parecido al del Cheetah, pero con un motor V12 de Lamborghini en posición delantera.  El LM 002 si acabó en producción con 301 unidades producidas. Y además, una de las cosas más curiosas es que la carrocería se fabricaba en la empresa Irizar, sita en Ormáiztegui en el País Vasco.



El “Cheetah “ de Bburago

Es curioso que en Bburago hiciesen el Cheetah , y no en cambio el LM 002, en cuanto este coche se empezó a fabricar en 1986, plena edad dorada de Bburago. Pero es una lástima no haber tenido ambos modelos entre el catálogo de Bburago. A ciencia cierta no se cuantas versiones hay del Cheetah a 1/24, rebuscando un poco he encontrado un kit de montaje de Otaki a nuestra escala, y después un mastodontónico  kit de Tamiya pero a 1/12 y pensado para RC.

 


Volviendo a Bburago, tenemos un modelo del que se hicieron numerosas versiones :

Versiones del Lamborghini Cheetah
Lambo Cheetah ( Serie SUPER ) Cod. 179 . Entre 1981 y 1983
                          Decor : Sahara Petroleum Assitence
Lambo Cheetah  ( Serie CARTOONS) Cod 1104. Entre 1984 y 1987
                          Decor: Smurfs ( Pitufo y añadía una figura de un Pitufo)
Lambo Cheetah  ( Serie CARTOONS) Cod 1186/0186. Entre 1982 y 1984
                          Decor : Forest Fire Appliance
Lambo Cheetah  ( Serie CARTOONS) Cod 1187/0187 . Entre 1982 y 1985
                          Decor : Explorer
Lambo Cheetah ( Serie CARTOONS) Cod 1188/0188. Entre 1982 y 1984
                           Decor : Tiger
Son las decoraciones más conocidas, hubo un SPA, con en techo negro y uno muy raro de color amarillo, con la decoración Objectif Plus.






Como podemos apreciar, hay versiones más realistas, como las SPA, Forest o Tiger, y otras más fantasiosas o pensadas para el público infantil, como la Explorer o la de los Pitufos. Abarcaban ambos mundos el del coleccionismo y el del juguete.

 


El coche en sí es casi un monumento al minimalismo, pero no hace más que respetar las líneas del coche real.Con lo que me he llevado una sorpresa ha sido con su escala. Siempre he pensado que con su tamaño respetaba como mínimo la de 1/24, pero sorpresas de la vida, realmente está a escala 1/26. Los 4790 mm del real, para reducirlos al tamaño del de Bburago los hemos de dividir por 26, por que como lo dividamos por 24, nos van a faltar un centímetro y medio de coche. En cuanto a la réplica en si, es el típico producto de la casa Bburago cuando era todavía realizado en Italia, y con los estándares de acabado y calidad de la época, que no eran malos, ni mucho menos. Una pieza aparentemente sencilla, pero muy bien lograda.


El chasis, conforma una media bañera sujeta por tres tornillos al chasis, en la ya conocida versión de bocadillo, dejando al habitáculo en medio. Bien logrado y con un plástico resistente no tiene excesivo detalle, pero está bien resuelto. La parte media del habitáculo en realidad va desde el morro, siendo la parte superior de las manguetas de la dirección ( la inferior es el chasis), el habitáculo y el vano motor. Como no tiene puertas, porque el  real no las llevaba, al ser un prototipo militar, se compone de los cuatro asientos, las enormes separaciones entre asientos y el suelo propiamente dicho. En el vano motor, tenemos parte de los elementos mecánicos y una representación muy sencilla del V8, que como para no variar y en los 80 era normal, se hacían cromados.

 


Como parte operable solo tenemos el capó motor posterior que abre a contramarcha a través de unos pequeños anclajes en los laterales.

 

 En el caso del SPA, podemos acceder al interior del capó motor, pero en caso del Forest Fire es imposible, por que el enorme depósito del CO2 no deja que se abra. Los detalles como el pico y la pala, el winch delantero, la rueda de recambio ( en caso del SPA) o de todo el conjunto de apagafuegos de CO2, incluyendo el cañón los veo bien resueltos, un tanto simples, pero bien.

 Las ruedas, muy conocidas entre los todo terreno de Bburago, ya que han sido montadas en los Jeep y los Land Rover, en realidad son las del….Lamborghini Cheetah, eso sí, convenientemente cromadas, lo mismo que los neumáticos de ancho balón, que aunque no son iguales a los del coche original, guardan cierto parecido.

Resumiendo tenemos una divertida pieza de coleccionismo, que puede ser puesta en la vitrina tal y como está de serie ( al Forest Fire, solo le he tenido que hacer el giratorio azul con su base que estaba desaparecido y readaptar el cañón a su base, que estaba rota, y dejarle con posibilidad de que sea giratorio), o entrar con un coche ya jugado y poder detallarlo al gusto de cada uno.  


 



















JOAN BETULO